Bienvenidos, queridos padres y educadores, a un fascinante viaje por el mundo del desarrollo del lenguaje de los niños de 1 a 2 años. En este apasionante período, nuestros pequeños exploradores se embarcan en un fascinante viaje de comunicación verbal y no verbal.
Únase a nosotros para explorar los hitos, los retos y los consejos para apoyar el desarrollo del lenguaje de sus tesoros más preciados.
El asombroso mundo de la comunicación infantil
El desarrollo del lenguaje de los niños de 1 a 2 años es un proceso asombroso lleno de descubrimientos y alegrías. Durante este período, los niños pequeños empiezan a comprender y expresarse mediante palabras y gestos, un hito importante en su desarrollo cognitivo y emocional.
Hitos en el desarrollo del lenguaje
De 1 a 2 palabras a los 15 meses de edad. «Mamá» y «Papá» son los principales protagonistas de su repertorio, pero pronto les seguirán otras expresiones encantadoras.
3 o más palabras a los 18 meses. Es habitual que pronuncien tres o más palabras, lo que indica que comprenden mejor el mundo que les rodea.
Instrucciones sencillas a los 18 meses: los bebés de esta edad pueden seguir instrucciones sencillas sin gesticular. Pedirles que hagan algo, como «tira la pelota a mamá», se convierte en una experiencia emocionante para ellos.
Desarrollo de gestos más complejos: gestos como sonarse la boca, señalar un objeto o asentir con la cabeza se hacen más complejos y sirven para expresarse, imitar acciones y jugar.
Formar frases de dos sílabas a los 2 años: A los 2 años, muchos niños pueden formar frases sencillas de dos sílabas. Esta es la siguiente etapa emocionante de su viaje lingüístico.
Se trata de un hito en el desarrollo del lenguaje en el entorno familiar.
Ahora que conocemos las principales etapas del desarrollo del lenguaje, es importante explorar formas prácticas de facilitar este desarrollo en casa.
Utilizar nombres propios:
No utilice palabras infantiles, sino nombres correctos de personas, lugares y cosas. Los niños pequeños son esponjas de conocimiento, así que hable despacio y con claridad.
Responda a los gestos:
Los gestos son una parte importante del desarrollo del lenguaje. Anime a los niños a participar en la conversación respondiendo a ellos y haciéndoles participar activamente. Es importante establecer conexiones entre los gestos y el lenguaje.
Juegos, canciones y rimas:
Los juegos gestuales, las canciones y las rimas son un tesoro para el desarrollo del lenguaje. Estimulan la imaginación y fomentan la conexión entre lenguaje y acción.
Lectura interactiva:
Leer en voz alta libros ilustrados llenos de color y animar a los niños a pasar las páginas y señalar los objetos que aparecen en ellas es una forma estupenda de fomentar el gusto por la lectura y desarrollar el lenguaje.
¿Cuándo debo preocuparme?
Es normal que los niños alcancen los hitos del desarrollo a ritmos diferentes, pero algunos indicadores comunes pueden ayudar a los padres a calibrar los progresos de su hijo pequeño. He aquí algunos hitos a los que hay que prestar atención:
A los 15 meses, intenta decir 1 ó 2 palabras además de «mamá» o «papá».
A los 15 meses, sigue un objeto familiar cuando se le nombra.
A los 18 meses, dice 3 o más palabras.
A los 18 meses, sigue instrucciones en un solo paso sin gesticular.
A los 2 años, señala cosas en un libro y al menos 2 partes del cuerpo.
A los 2 años dice al menos 2 palabras juntas, por ejemplo «más leche».
Si tienes alguna duda o preocupación sobre el desarrollo del habla de tu hijo, siempre es aconsejable consultar a su pediatra.
Conclusión
Durante el apasionante viaje del desarrollo del habla, cada palabra que pronuncian nuestros hijos es una joya preciosa, un paso hacia la expresión plena de sus pensamientos y sentimientos. Mientras exploramos este mundo del lenguaje, no olvidemos que el blog de Cenicientas entrelaza maravillosamente historias mágicas, cuentos encantadores y consejos de crianza para nuestros hijos. Invito a todos los padres a explorar este tesoro de conocimientos y magia que nutrirá las mentes jóvenes y abrirá sus corazones a un mundo de descubrimientos.
Que la magia de las palabras y los cuentos acompañe siempre a nuestros hijos en su viaje de crecimiento y aprendizaje. ¡Hasta la próxima aventura!