Anne Sullivan es famosa como de las mejores maestras del planeta tras trabajar con Hellen Keller, una niña muda, sueca y ciega, a la que logró educar a leer, redactar y charlar. Helen era una niña inútil de comunicarse y absolutamente nadie aguardaba que fuera a tener ningún futuro. Con la ayuda de Anne Sullivan aprendió a redactar, leer y charlar, fue a la universidad y se transformó en escritora y conferenciante.
Anne Sullivan nació en mil ochocientos sesenta y seis en una familia muy pobre. Se quedó ciega a los cinco años de edad, mas tras dos operaciones recobró la visión. Perdió a los miembros de su familia poco a poco y decidió dedicarse a asistir a otros niños ciegos, graduándose con honores y aprendiendo el abecedario manual.
Fue entonces cuando conoció a Hellen Keller, con la que trabajó intensamente para conseguir que pudiese llegar a comprender el ambiente del que vivía plenamente apartada. Helen Keller se había quedado sueca y ciega para toda la vida tras padecer una enfermedad a la edad de diecinueve meses. La niña era muy agresiva puesto que no conocía otro modo de comunicación y Anne Sullivan debió lidiar con este primer inconveniente mediante la paciencia y la insistencia.
Después trató de enseñarle el lenguaje manual. El procedimiento era siempre y en todo momento el mismo: le ponía en contacto con un objeto y, seguidamente, deletreaba la palabra en su mano. Poquito a poco Helen Keller comenzó a comprender este lenguaje y a sentirse motivada para aprender nuevas palabras. Su agresividad redujo y aprendió modales.
Una vez logrado este progreso, Anne Sullivan le enseñó a leer en Braille y asimismo a leer los labios de las personas tocándoles con los dedos, lo que sirvió después a fin de que aprendiese a charlar. La niña debió prestar mucha atención a las vibraciones que se generaban en la garganta de su profesora toda vez que pronunciaba una palabra, para entonces poder imitarlas y aprender a charlar.
Esta historia prueba que, sin la ayuda de esta increíble profesora, Hellen Keller nunca podría haber aprendido a leer, redactar o bien charlar y habría pasado su vida siendo una persona sin capacidad para comunicarse.
Hellen no solo logró desarrollar sus actitudes sociables, sino llegó a estudiar, ir a la universidad y graduarse con honores, merced a la ayuda de Anne, que interpretaba en sus manos lo que los profesores afirmaban en clase. La pupila escribió un libro sobre su vida y, muchos años después se hizo una película sobre su historia, llamada ‘El milagro de Ana Sullivan’, que ganó un Óscar y en la que se puede ver de qué manera fue este aprendizaje y qué técnicas empleó la profesora.
Si deseáis conocer más sobre este especial caso, podéis ver acá unos fragmentos de la película.
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